jueves, 11 de agosto de 2011

Luciana Tagliapietra - Diagrama de Ben (2011)

Mi enamoramiento de un proyecto musical tiende a sorprenderme. A veces, la ráfaga de frescura llega con la primera escucha y en otras, cómo en este caso, el proceso se torna paulatino y va creciendo en dosis diarias. Hoy, declaro mi amor por el segundo disco de la argentina Luciana Tagliapietra y describo en unas cuantas líneas mi fascinación por estas melodías sencillas decoradas con encajes orquestales que hablan del amor y la entrega con un encanto único y envolvente. 

¿Quién iba a imaginar que está chica estuviese tan cerca y no me hubiera percatado de ella? Compañera de sello de la talentosísima Violeta Castillo, Luciana había rondado mis lecturas y una que otra escucha gracias a las continúas menciones en Club fonograma y la inclusión de Trompetas en uno de sus compilados. Hasta que me decidí a prestarle toda mi atención y escucha tras escucha, mientras las melodías y las letras se me pegaban a la cabeza, mi admiración se fue convirtiendo en una necesidad diaria de sucumbir ante la dulzura visceral con la que esta mujer transcribe sus emociones. 

En Las Carreras, por ejemplo, parece que confluyeran el cinismo de Babasónicos y los quebrantos emocionales de Entre Ríos: “Creía que podía soportar los autos, las personas, lo que me digan. Soñaba que apostaba en las carreras y ganaba”. La melodía armada a la medida se convierte en el paisaje adecuado para las palabras de Tagliapietra.

Diagrama de Ben es un disco con dos protagonistas que interactúan creando la pareja perfecta. Por un lado tenemos la musicalización luminosa, delicada y meticulosa que acompaña cada una de las 7 composiciones del disco. El gancho inmediato es el fascinante primer single Trompetas, un despliegue innegable de genialidad sonora, atractivo y esencial que tiene como responsable al productor Juan Cruz Palacio, gestor del sello independiente YoConVoz

La segunda protagonista es la voz de Tagliapietra y su singular forma de interpretar, capaz de transferir calma en cada palabra. Sus letras juegan a armar paisajes y escenas, como en la delirante Sí las cosas, en la cual las imágenes se nos vienen a la mente desde la primera línea y el sentimiento se debate entre la soledad de un recinto y la emoción esperanzadora de viajes en camión. 

El Bicho es otro singular ejemplo de reminiscencia cinematográfica. Desde la lirica totalmente grafica, hasta la musicalización animada. Imposible es no entrar al requiebro en ese segundo momento en el que una transfigurada Luciana pregunta por su amor: Sí conectas con estos instantes de metamorfosis, tienes el soundtrack perfecto para tus enamoramientos enfermizos. 

Sí entre mis estimados lectores hay algún tipo de curiosidad sobre la duración del disco para ser llamado LP y no EP o sobre el título del mismo, debo decir que son dos temas relacionados. Los Diagramas de Venn (wikipedia knows it all) fueron la idea que dio pie para crear un disco corto que da la impresión de ser más largo de lo que en realidad es. Me remonto nuevamente a la idea que tuvo Violeta Castillo de dividir un EP en dos, y no puedo más que aplaudir esta genialidad que permite nuevas formas de acercamiento a la música. 

Mis últimas líneas de esta reseña están dedicadas a las notas pegadizas de Trompetas y esa forma tan peculiar que tiene de enmarcar el enamoramiento inesperado, el que al final termina convirtiéndose en un delirio duradero y en la fé absoluta de un melómano en una interprete con ángel y rock para comprarme. 

¿Quién iba a imaginar? ¿Quién iba a imaginar?

El Playlist:


Compra  Diagrama de Ben
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2 comentarios:

  1. pónganse el disco de Fakuta mejor, está grosso!

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  2. quiero tener sus discos, que lata que no lo encuentro en ninguna parte :(

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